A más del fallecimiento de Byron Guatatuta, el saldo de daños ocasionados a bienes público y privados es incalculable. La ciudadanía está atemorizada.
Inició la segunda semana de protestas, el ingreso a Puyo continuaba cerrado al paso vehñicular. Vía Shell-Puyo ex hacienda Zulay. Sector Picolino ingreso a la parroquia Tarqui y el puente en la calle 9 de octubre, acceso al hospital Puyo.
Se cumplía el noveno día de manifestaciones y un gran contingente de policías llegaron al puente de ingreso a la parroquia Tarqui, previamente dialogaron con los manifestantes para poder abrir el paso de forma pacífica. Sin embargo, eso no fue posible y vino el enfrentamiento.
Fueron más de dos horas de un conflicto sin precedentes, gas lacrimógeno lanzado por los uniformados, los protestantes respondían con bombas molotov y armas caseras (voladores) y hacían retroceder del sitio a los policías.
Byron Guatatuca, fallecido durante enfrentamiento
En medio del conflicto, se escuchó gritos alarmantes. “Un muerto, ayuden, ayuden, mataron al hermano”, decían. En efecto, se comprobó que Byron Guatatuca, sufrió un accidente, fue llevado al hospital Puyo y luego de unos minutos confirmaron que perdió la vida. El fallecido tenía 44 años de edad, estaba casado y era padre de 4 hijos, pertenecía a la nacionalidad Kichwa y se convirtió en la primera víctima de las protestas en Pastaza.
Como reacción a lo acontecido, en el mismo sitio, manifestantes incendiaron un patrullero de la Policía Nacional, quemaron la motocicleta de un comunicador social, se habló que había cerca de 15 heridos, tanto protestantes como uniformados. Tras estos incidentes, elementos de la Policía se retiraron y caminando avanzaron hasta el cuartel ubicado en el centro de Puyo, pero eran seguidos por más de un centenar de manifestantes, los que a su paso fueron quemando y destruyendo la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) del barrio México, tenían como consigna vengar la muerte de su compañero.
Policías huyeron para salvar sus vidas
Minutos más tarde, manifestantes llegaron hasta el cuartel policial en Puyo, rompieron las puertas, ingresaron al edificio y destruyeron todo lo que encontraron, prendieron fuego a seis patrulleros, ocho motocicletas y 10 vehículos particulares de policías; todavía no han cuantificado la cantidad de armas y pertrechos que habrían llevado los protestantes. En estas instalaciones permanecían más de 100 alumnos del curso de policías, quienes junto a todo el personal que retornó del operativo debieron huir para salvaguardar sus vidas.
Al parecer este atentado no fue suficiente y de inmediato se trasladaron a la sucursal del Banco de Guayaquil, igual destruyeron las puertas, ventanales, cajero automático, ingresaron para destruir y se llevaron todo lo que encontraron. Muy ajeno, el local de la marca Totto fue saqueada integramente.
El pasado miércoles, representantes indígenas y de sectores sociales entregaron al comandante de la Brigada Pastaza, a dos policías que se encontraban retenidos y una cantidad de implementos de protección de la Policía. Al día siguiente militares de la Brigada Pastaza, retomaron el control de la ciudad, manifestantes continuaban con la protesta y habitantes de la ciudad sentían temor.
La provincia de Pastaza se encuentran bajo el estado de excepción, decretado por el presidente Guillermo Lasso, mediante decreto ejecutivo Nro. 459 del 20 de junio del 2022.