Tras conocerse la intervención de Norero en el club Naranja Mekánica del Guayas, se tomó esta medida por parte de la Unidad de Análisis Financiero (UAFE).
Desde enero del 2024, la Unidad de Análisis Financiero intensificará la supervisión de las transacciones de los equipos de Liga Pro del fútbol ecuatoriano, según lo establecido en la reciente reforma a la Ley de Lavado de Activos de abril de 2023 y una resolución emitida por la propia unidad de control para garantizar el cumplimiento de esta normativa.
Los clubes de la Serie A y Serie b de Liga Pro se verán obligados a reportar mensualmente todas las operaciones, ya sean nacionales o internacionales, mismas que superen los 10 mil dólares, esta medida se aplica a transferencia de jugadores, salarios que excedan esa cifra y cualquier transacción que alcance dicho monto.
El incumplimiento de estas disposiciones conllevara sanciones, desde multas hasta cancelación del estatus legal de la institución que no cumpla con los reportes exigidos. La entrega de información incorrecta o la omisión de datos también serán objeto de medidas punitivas. La UAFE informará a la Fiscalía sobre transacciones inusuales o injustificadas que identifique durante su análisis.
Las operaciones consideradas sospechosas son aquellas que no concuerden con el perfil económico y financiero previamente mantenido por los clubes. Michael Fitzpatrick, expresó su preocupación sobre el potencial uso de ciertos clubes para el lavado de activos.
En respuesta a estas inquietudes, el presidente de Liga Pro, Miguel Ángel Loor destacó que los clubes han tenido balances auditados desde 2019. Además aseguró que, por unanimidad los clubes decidieron contratar un software y asesoría personalizada para cumplir con los requisitos de la UAFE, se están buscando acuerdos con esta entidad y el Ministerio del Interior para fortalecer las medidas de control.
En total 26 clubes, 16 de Serie A y 10 de Serie B, estarán sujetos a estas nuevas regulaciones y deberán presentar sus informes financieros a la UAFE.