La posesión del nuevo mandatario se realizó en el pleno de la Asamblea Nacional este 23 de noviembre del 2023.
Daniel Noboa asumirá la Presidencia tras haber ganado las elecciones extraordinarias convocadas después de que el actual presidente Guillermo Lasso decretara la muerte cruzada el pasado 17 de mayo. El nuevo mandatario venció en las urnas de la segunda vuelta, con el 51,83 % de los votos a la correísta Luisa González.
Noboa tendrá un corto mandato, de apenas 16 meses, para completar el periodo de Lasso que finaliza el 2025. El nuevo presidente ha anunciado que una vez que asuma el cargo, declarará un estado de excepción para enviar dos leyes económicas urgentes a la Asamblea.
Entre los asuntos urgentes que le esperan a Noboa, figuran un déficit fiscal de 3.500 millones de dólares hasta fin de año, la necesidad de solventar el gasto corriente para el sector público, generar empleo y cumplir con los multilaterales. Además afrontará la reducción de ingresos fiscales debido a la prohibición de explotar el Bloque 43-ITT, uno de los yacimientos de petróleo situados dentro del biodiverso Parque Nacional Yasuní.

Su oferta de campaña para impulsar el trabajo juvenil mantiene a esa población expectante, mientras ronda la incertidumbre por la forma en que abordará la crisis energética, que ha obligado a racionamientos eléctricos diarios, y las consecuencias de la anunciada llegada del fenómeno del niño.
Dentro de su discurso, Noboa, pidió unidad a la ciudadanía y dejar viejos esquemas políticos en el pasado, para sacar al país adelante y enfrentar grandes retos, como el desempleo y la creciente violenta. Además subrayo que cree en la fuerza de la juventud y puntualizó que a muchos les costará encasillarlo en viejos paradigmas.
El país necesita cambios que requieren tener sentidos de urgencia, dijo en un discurso que duró menos de diez minutos, al afirmar que, aunque cree que su familia ha sido perseguida políticamente en el pasado, se debe romper el ciclo de revanchas. El suyo insistió es un proyecto “proEcuador” y “antinada”, pues lo “anti” tienen techo y los “pro” sin infinitos.

Henry Kronfle, presidente de la Función Legislativa del Ecuador, inicia su discurso en el evento de la posesión del nuevo mandatario del Ecuador. “La democracia es libertad, equidad social y económica, coexistencia, no existen diferentes formas de democracia”, inició Kronfle.
“Hoy por la gravísima crisis, esta Asamblea sabe de la importancia de crear las condiciones necesarias para que el poder ejecutivo pueda resolver los problemas urgentes. La mayoría de las fuerzas políticas han demostrado que hemos priorizado las coincidencias a las democracias. El valor de la palabra se debe recuperar”, agregó.
“Señor presidente electo, lo invito a que juntos trabajemos para lograrlo. Lidere usted el cambio. Lidere un país en donde los ciudadanos sean el motor. Un Ecuador solidario, en el que todos estemos juntos y tranquilos. Un Ecuador que proteja la producción nacional. Un Ecuador que entienda que el problema es la pobreza y que solo se puede combatir creando riqueza”, continúa.
“Construyamos ese país de paz que todos anhelamos”, concluye Kronfle, citando antes a Dios y la virgen del Panecillo.

Autoproclamado de centroizquierda y apoyado por fuerzas de derecha, el hijo del magnate bananero Álvaro Noboa asumió a sus 35 años para convertirse en el presidente más joven de la historia ecuatoriana tras el retorno a la democracia en 1979.
A la crisis institucional se sumó la violencia de bandas narco con poder internacional que dejan unos 3.600 asesinatos en lo que va del año, según el Observatorio Ecuatoriano del Crimen Organizado.
“Para combatir la violencia hay que atacar la desocupación, el país necesita empleo y para ello enviaremos reformas urgentes”, advirtió Noboa, que tras la ceremonia en el Legislativo se trasladó a la sede de gobierno, donde le esperaron varios cientos de simpatizantes.
Enemigo común
Noboa “debe asumir que es un gobierno transitorio y por tanto debe ser altamente pragmático y realista respecto a sus capacidades y objetivos que va a trazarse para que no genere nuevamente una frustración para los ecuatorianos”, dijo a la AFP el politólogo Santiago Cahuasquí, de la Universidad Internacional SEK.
Nacido en Estados Unidos y egresado de prestigiosas universidades extranjeras, el nuevo mandatario es sommelier, sabe de música, intentó ser vegetariano, colecciona ajíes y le apasionan los autos y los caballos.

Su padre, quien no acudió al Congreso por problemas de salud, intentó sin éxito llegar en cinco ocasiones a la presidencia.
El principal desafío del mandatario será enfrentar las numerosas bandas asociadas a carteles mexicanos y colombianos que imponen el terror con cadáveres desmembrados, incinerados y colgados de puentes.
Entre 2018 y 2022, la tasa de homicidios se cuadriplicó y trepó a 26 asesinatos por cada 100.000 habitantes.
También recibirá un sistema carcelario en llamas, donde los choques entre organizaciones dejan más de 460 muertos desde 2021. “La tarea es dura y difícil y los días son pocos”, expresó Noboa en referencia al corto periodo de gobierno.