San Luis al borde del abismo y a punto de desaparecer
Las viviendas se encuentran ubicadas a menos de 50 metros del socavón, el peligro es inminente de caer al precipicio.
San Luis; Nuestro medio de comunicación visitó la comunidad San Luis, ubicado en la parroquia Gonzalo Díaz de Pineda, otrora sitio de constante movimiento comercial, económico y turístico. Para llegar al sitio debimos viajar cerca de ocho horas desde Lago Agrio, Nueva Loja, al ingresar por su calle principal es notorio la desolación, desesperanza y angustia que viven sus moradores, que, a decir de la mayoría, han sido olvidados e ignorados por las autoridades estatales.
Recordar que la tragedia para este sector y la Amazonia empezó en febrero del 2020 con la erosión del río Coca, situación que se agravó de manera acelerada; en el caso de San Luis el efecto es más notorio debido a que el poblado está cerca al borde del precipicio. Han pasado cerca de dos años y las autoridades poco o nada han realizado por las más de 60 familias asentadas en el lugar.
A Santa Rosa evacuaron a 10 familias, los demás deben esperar
Carlos Andi, presidente del sector San Luis, manifiesta que desde la erosión del río Coca ha sido mínimo el apoyo de las autoridades. “Han visitado en algunas ocasiones, pero solo para ofrecer y tomarse la foto, luego se olvidan de nuestra tragedia”, recriminó.
En la parroquia Santa Rosa, 11 familias dentro de una primera etapa fueron tomadas en cuenta para la reubicación, una familia no calificó, a las otras 10, el municipio del Chaco entrego las escrituras de los terrenos para la construcción de las viviendas por parte del Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (MIDUVI) en un aproximado de dos meses.
Todavía quedarían 43 familias pendientes para la reubicación, considerando que la erosión no tiene retorno y peligra en un corto plazo el poblado a desaparecer. Sobre los servicios básicos: la población consume agua entubada de pozos, al menos las familias disponen de energía eléctrica.
26 estudiantes usando mascarillas reciben clases en la escuela del sector
Perla Legña, rectora de la escuela de Educación Básica Pluridocente, manifiesta que La escuela se encuentra aproximadamente a 150 metros del socavón, al momento asisten un total de 26 niños de educación básica, en inicial superior un total de 36; pues algunos por decisión propia abandonaron el lugar. “La escuela estará en funcionamiento por qué hay personas viviendo en el sector y niños que educar”, indicó.
Comentó la docente, que conforme avanza la erosión y el socavón esté a 50 metros de distancia de las viviendas, las familias serán evacuadas a la Parroquia Santa Rosa.
Desde el Ministerio de Educación, la escuela ha recibo apoyo con el envío de psicólogos para los padres de familia, docentes y estudiantes, una vez que los estudiantes se trasladen a Santa Rosa, el personal docente lo hará de igual manera a la Unidad del mileno del sector.
Debido a la temporada de verano, donde es evidente el extenso polvo que sale del socavón, la ceniza del volcán Reventador y los trabajos que la empresa OCP realiza en la parte posterior, ha obligado a la población a utilizar permanentemente mascarillas para mitigar los efectos y evitar afecciones a las vías respiratorias de los habitantes.
Nancy Chicaiza, habita aproximadamente 12 años en San Luis, expresa su preocupación por la erosión del río Coca que empezó en San Rafael, ahora en San Luis y avanza a San Carlos, en medio de la incertidumbre, están pendientes para actuar oportunamente.
Productos de la zona se pierden por falta de una vía, afecta la economía de los hogares
Emma Avilés, moradora del lugar, vive por más de 40 años en el sector de las Tres Cruces, que colinda con San Luis, su actividad principal es la agricultura y ganadería lo que en actualidad no pueden desarrollar porque no existe transporte. “Las autoridades están dormidas, en especial el Gobierno central, nos ignoran por completo, estamos desesperados por la situación económica”,expresó.
Nuestro medio de comunicación trato de mantener una entrevista con la máxima autoridad de la alcaldía del cantón El Chaco, pero por la agenda prevista por la autoridad no fue posible.


























