Antecedentes: Tras el boicot realizado por los países europeos al mundial de 1930, Italia se esforzó para obtener la sede de la II Copa Mundial. Benito Mussolini, del Partido Nacional Fascista, se encargó personalmente de que Italia fuese elegida sede. Hasta hoy se sospecha que influyó en la obtención del título. El torneo se desarrolló por completo en un sistema de partidos eliminatorios simples. Este sistema fue utilizado en este evento y en el siguiente.
Duración del mundial: Desde el 27 de mayo al 10 de junio de 1934
Estadísticas: Selecciones 16; Partidos 17; Goles 70; Promedio de gol 4.12; Goleador Oldrich Nejedly con 5 goles (Checoslovaquia).
Estadios y ciudades sedes: Para la ocasión, se construyeron o renovaron ocho estadios: Stadio del Littorale (Bologna), Stadio Giovanni Berta (Florencia), Stadio Luigi Ferraris (Génova), Stadio Calcistico San Siro (Milán), Stadio Giorgio Ascarelli (Nápoles), Stadio Nazionale del Partito Nazionale Fascista (Roma), Stadio del Littorio (Trieste), Stadio Benito Mussolini (Turín).
Equipos participantes: Alemania, Argentina, Austria, Bélgica, Brasil, Checoslovaquia, Egipto, España, Estados Unidos, Francia, Hungría, Italia, Países Bajos, Rumanía, Suecia, Suiza.
El camino del campeón y final: Los italianos se deshicieron de Estados Unidos en octavos con un contundente 7–1. Italia y España en cuartos terminó en empate (1 – 1), entonces se vieron obligados a jugar un partido de desempate que se celebró al día siguiente. Los italianos ganaron 1 – 0. El gol del triunfo marcó, Giuseppe Meazza.
En las semifinales que se celebraron el 3 de junio de 1934, Checoslovaquia le ganó a Alemania 1 – 0 e Italia resultó ser más fuerte que Austria, ganando 1 – 0. Una semana más tarde el partido final se celebró en el Estadio Nacional del Partido Nacional Fascista en Roma. El tenso duelo terminó en empate (1 – 1) y fue en la prórroga cuando Ángelo Schiavio anotó el gol definitivo.
Las aventuras de 1934: Después del Mundial, el central del juego del partido Italia-España, René Mercet, fue expulsado de por vida del arbitraje, tanto por la FIFA como por la Federación Suiza por su actuación en el partido.
Mussolini, estuvo presente en todos los juegos de la Selección, los estadios repletos de camisetas negras, la milicia de su régimen también presionaba en la Copa.
“La Batalla de Florencia”, fue nombrado así el partido de cuartos entre Italia-España por la agresividad. Los medios respondieron con la presencia de corresponsales y periodistas de 249 periódicos de todo el mundo, incluidos 65 italianos, 27 franceses, 23 alemanes y uno de Inglaterra.